A mi, Camilo Sesto no me gustaba nada de nada. Y no entendía a mis amigas, algunas de las cuales estaban locas por él. Ya se sabe, el fenómeno fans en las adolescentes. Con los años, y a medida que el personaje me ha ido pareciendo más deprimente, más esperpéntico, he aprendido a respetar al cantante, su voz y sus canciones. Y hasta ha llegado a formar parte de mi ideario, de mis sueños y de mis gestos.
Mi amiga Xena sabrá valorar esta canción, que seguro que a ella le gusta mucho.
Camilo se parecía mucho a un amigo mío. Eran clavados. Sólo que mi amigo ha sabido envejecer mejor. No se le ve una parodia de sí mismo.
Pero Camilo está en el recuerdo de mucha gente. No se trataba sólo de que tuviera una bonita voz, sino de sus recursos vocales, y de los retos que emprendió sin miedo al fracaso.
Por todo ello se ganó mi respeto como cantante, aunque como persona... lo dejamos en suspenso.
como persona?? cuenta cuenta, que las (no tan) nuevas generaciones no nos enteramos de nada ;)
ResponderEliminarA mí me pasa algo parecido, cuando pequeña todas las chicas estaban locas por él pero a mí no me llamaba mucho. Y ahora veo que tenía buenas canciones. Y sí parece una caricatura con el tiempo. Penita.
ResponderEliminarBuena selección de canciones.